La concejala de Consumo Responsable, Marta Ramos, ha difundido hoy los mensajes referentes a la actualización de los derechos del consumidor, tal y como se publicó el 1 de abril de 2019 en el DOCM, del Estatuto de las Personas Consumidoras en Castilla-La Mancha. La principal novedad normativa se recoge en las responsabilidades que nos otorga la ley como consumidores y usuarios.
De ahí el eslogan elegido este año para conmemorar el día Mundial de los Derechos de los Consumidores: ‘Como persona consumidora, practico mis derechos, acepto mi responsabilidad’. Este mensaje se lanza un año después, debido a que en 2020 se tuvieron que suspender todos los actos en torno a este 15 de marzo debido a la pandemia mundial.
La campaña plantea una serie de objetivos, como: concienciar de la necesidad del Día Mundial de los Derechos de las Personas Consumidoras, divulgar los derechos básicos y los nuevos derechos, difundir las responsabilidades y obligaciones, concienciar la importancia del consumo responsable (tal y como además recoge el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 12) y proponer a los centros educativos actividades y talleres para dar a conocer los derechos como personas consumidoras. “La educación es la base de cualquier materia que queremos que se adquiera para una edad adulta”, ha subrayado la concejala del ramo.
Entre los derechos básicos están: protección, información, educación, formación, representación y acceso a los productos; los nuevos derechos: medio ambiente saludable, seguridad y privacidad, beneficios derivados nuevas tecnologías o soberanía alimentaria, entre otros; y las responsabilidades: exigir el pleno reconocimiento y el ejercicio efectivo de sus derechos, hacer uso adecuado de las instalaciones y equipamientos, no impedir el ejercicio de los derechos de otras personas, entre otras.
Cerca de 3.000 demandas de consulta o reclamación durante 2020 en la OMIC
Respecto a los datos del año 2020 recogido en la memoria anual de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), la concejala de Consumo Responsable ha indicado que se atendieron un total de 2.910 demandas, de las cuales 2.431 fueron consultas y 479 fueron reclamaciones. Se ha producido un descenso, ya que en 2019 se registraron 3.415. En cuanto a la manera de presentarlas también ha habido un cambio notable, provocado evidentemente por el confinamiento y las restricciones sanitarias, por lo que solo un 27,02% se han presentado de forma presencial. El 59,31% se hizo por teléfono y el 13,61 por correo electrónico.
Como viene siendo la tónica habitual en los últimos años, los sectores que más consultas han recibido son el de las telecomunicaciones, empresas de electricidad y gas o el alquiler de viviendas y comunidades de propietarios, seguidos de las entidades financieras, las compras a distancia o las especialidades médicas. Respecto a las reclamaciones, por sectores, los que mayor número han registrado han sido: telecomunicaciones, empresas de electricidad y gas, las agencias de viajes o los transportes públicos y la compra o reparación de automóviles.
Campañas para no desperdiciar alimentos y para comprar en las tiendas de barrio
Respecto a las actividades que se realizaron durante todo el año pasado, Marta Ramos ha señalado la campaña de Reducción del Desperdicio Alimentario y de Consumo Responsable ‘No desperdicies, antes de tirar, piensa y actúa’, la campaña de Navidad bajo el eslogan ‘Vivo en mi barrio, compro en mi barrio’ y, mientras la crisis sanitaria lo permitió, se realizaron 12 visitas (con 427 escolares) al Centro de Formación del Consumidor ‘Agustín Esteban’; entre otras acciones.